El 29 de agosto, el Dow anunció que había cerrado con seguridad sus operaciones de fabricación en Luisiana. Dow Chemical Plant en la Costa del Golfo de los E.E.U.U. ha desarrollado un plan completo y claro del estado de preparación del huracán para minimizar interrupciones de la producción mientras que protege la seguridad y sanidad de empleados, de las comunidades, y del ambiente.
Actualmente, el huracán Ida hace avistamiento de tierra cerca del puerto de Fourchon, Luisiana, con una velocidad del viento continua máxima de 150 mph (241 kilómetros por hora). Se convirtió en un huracán de la categoría cuatro en el nivel de la tormenta de Saffir-Simpson. No fue reducido a un huracán de la categoría 3 hasta la tarde de la 29na hora local.
El Golfo de México y la Luisiana son caseros a las compañías de la exploración petrolífera de petróleo y gas y a las plantas petroquímicas. Según la oficina de los E.E.U.U. de la seguridad y de la aplicación ambiental (BSEE), a partir de la 29na hora local, los productores en la región han cerrado el aproximadamente 96% de su aceite y el 94% de su producción del gas natural. Hay una alta probabilidad que las plantas petroquímicas a lo largo de la costa también serán afectadas.
El impacto del huracán en energía y productos químicos tiene dos trayectorias: uno es que la fuente de petróleo crudo y de gas natural en el extremo costado será afectada, y la industria química será apoyada por costes, y los precios subirán; el otro es que el huracán afectará más lejos al comienzo de plantas petroquímicas en zonas costeras y la fuente de productos químicos será afectada. Los precios han subido.
Además del Dow, Exxon Mobil, Shell, y BASF también cesan la producción. El Huntsman estaba en las líneas laterales el pasado viernes, pero dijo que él tomaría medidas preventivas una vez que la tormenta se intensificó.